Encuentro entre SOS Casco Antiguo e Inmobiliaria Municipal

En la tarde de ayer, la Inmobiliaria Municipal abrió sus puertas para recibir a varios miembros de la iniciativa vecinal S.O.S. CASCO ANTIGUO, colectivo ciudadano que ha elaborado un plan de barrio con el que pretenden sumarse a las voces que apuestan por una urgente recuperación del centro histórico de la ciudad.

D. Luis Chacón y Dª Elena Olea, responsables de la Inmobiliaria Municipal, recibieron a los representantes de este colectivo para estudiar los posibles puntos de encuentro que reclama una voz ciudadana que suma ya más de dos mil firmas.

Sobre la mesa, el informe elaborado por esta plataforma, que identifica los problemas que sufre el barrio día a día al tiempo que sugiere posibles soluciones “desde la perspectiva humana de residentes y visitantes”. La reunión se prolongó por espacio de tres horas, tiempo en el que se analizó la función que la Inmobiliaria Municipal desarrolla en este barrio catalogado como área marginal por la Estrategia DUSI, y que ha sido dotada con 18 millones de euros destinados a la recuperación de los núcleos urbanos más desfavorecidos, en especial el Casco Antiguo dada su singularidad e interés patrimonial. En este sentido, la iniciativa vecinal apuesta por la dotación y ampliación de funciones de la Inmobiliaria, siendo este organismo una estructura estratégica, indispensable y necesaria para la recuperación del barrio. <<La INMUBA goza de la experiencia y organización necesarias para ser la ansiada oficina del Casco Antiguo, donde cada vecino pueda acudir para ser asesorado, presentar quejas o aportar sugerencias relacionadas con cualquier aspecto del barrio. Es un núcleo poblacional muy grande, con más de once mil vecinos, y su problemática es tan variada y extensa que requiere una entidad que comprenda a la perfección las características del barrio y actúe de modo interrelacionado, global>>. Signo de este buen hacer y esta experiencia es el hecho de que los responsables de la inmobiliaria conozcan a un buen número de vecinos por su nombre y apellidos, y de que los vecinos les conozcan a ellos. <<El ciudadano debe saber que la Inmobiliaria está ahí para atenderles e informarles, no sólo para operar con propiedades>> –apuntaron los responsables-. <<No es extraño que nos hayamos excedido en nuestras funciones con el fin de ayudar a los vecinos que acuden a nosotros. Algunos no tienen conocimientos legales suficientes ni medios para afrontar el enorme papeleo que, en ocasiones, entraña la relación con la Administración>> —señalaron al colectivo—. <<Quieren ser algo más que una oficina rehabilitadora, quieren ser el pulso del barrio, su centro de asesoramiento, un organismo próximo al vecino, que comprenda al ciudadano y tenga empatía con él. Y nosotros así lo deseamos>> —confiesan los miembros de la plataforma.

Sobre El Campillo, que aunque no es un asunto en el que el colectivo S.O.S. ahonde, dada la complejidad del proyecto y la necesidad de conocimientos técnicos para pronunciarse, los portavoces vecinales valoran enormemente que la Inmobiliaria pretenda variar su línea de actuación y se centre primero en la labor rehabilitadora del entorno próximo al área afectada, especialmente si busca reubicar en el mismo barrio a los vecinos que sufren el temor a la expropiación de sus inmuebles. <<Es muy importante “comenzar a hacer” —señalan los miembros de la plataforma—. Nuestro deseo es que con la inversión pública y las actuaciones de la Inmobiliaria, las subvenciones vigentes y un lugar desde donde recoger el pulso del barrio, la iniciativa privada despierte de su letargo. Es esta iniciativa la que recuperará finalmente el centro histórico; los caudales públicos no pueden hacerlo por sí solos. Pero la Administración, por todos sus medios, debe servir de ejemplo y “chispa de la vida”. Queremos vecinos, gentes que habiten los edificios que hoy mueren de olvido y ruina>>. En esta línea, la plataforma ciudadana apuesta por una “pinza” que recupere la manzana más degradada de este centro histórico, la que se sitúa entre la plaza de Cervantes y el futuro Campillo. <<Estamos seguros de que la peatonalización de las plazas mediante plataforma única causará un efecto llamada, muy especialmente en el entorno de la plaza Cervantes, que es una de nuestras mejores y más hermosas plazas y que, a día de hoy, no ha brillado cuanto puede brillar. Si la INMUBA termina siendo esa oficina del centro histórico que deseamos y su labor rehabilitadora se incrementa, si el Campillo termina por ser habitado, si las plazas se vertebran con la plataforma única, la recuperación será imparable>> —auguran los vecinos.

Para finalizar, remarcar el tono cordial, conciliador y distendido de los responsables de la Inmobiliaria. Y una promesa: elaborar un catálogo actualizado de las edificaciones e inmuebles degradados en el centro histórico de la ciudad. Y un deseo: que las palabras lleven a los hechos.